Rutina de cuidados para la piel con acné
La piel con acné requiere de una serie de cuidados específicos, que van desde una exhaustiva limpieza a la hidratación y la protección solar con productos específicamente formulados.
Conscientes de las necesidades específicas de la piel con acné, en Abedul hemos desarrollado Acnidul, una línea de productos para pieles grasas o con tendencia acneica.
Os explicamos a continuación los pasos que debería incluir toda rutina de cuidados para la piel con acné.
Limpieza de la piel con acné
Toda rutina de cuidados ha de partir de una buena higiene. En el caso de la piel grasa o con tendencia acnéica esto es de vital importancia, ya que el sebo puede obstruir los poros.
Se recomienda limpiar la piel al menos dos veces al día, por la mañana y por la noche, antes de acostarse. Puedes utilizar el Gel purificante Acnidul.
Contiene ácido salicílico, que alivia la hinchazón y el enrojecimiento asociados al acné; extracto de té verde, tomillo y caléndula, con propiedades antisépticas y antibacterianas.
Es aconsejable aplicarlo sobre la piel previamente humedecida, masajeando la piel con suavidad. A continuación dejar actuar unos segundos y aclarar con agua.
Para reforzar la limpieza de las pieles grasas o con tendencia acneica se recomienda utilizar una o dos veces por semana la Mascarilla seboreguladora. Formulada con arcilla y ácido salicílico, contribuye a la renovación de la piel.
Hidratación con productos específicos
Algunas personas tienen la falsa creencia de que para eliminar la grasa es mejor no hidratar la piel. Nada más lejos de la realidad, eso sí, es necesario utilizar productos específicos no comedogénicos.
¿Qué significa esto? El término comedogénico procede de la palabra “comedón”, que no es ni más ni menos que el poro obstruido. De ahí que las cremas no comedogénicas son aquellas que gracias a su textura ligero y no oleosa previenen la obstrucción de los poros.
En Abedul te proponemos la Crema-gel hidratante matificante Acnidul, que te ayudará a eliminar brillos e imperfecciones. Contiene ácido glicólico, para acelerar la renovación de la piel, y probiótico procesado, para combatir el efecto de hongos y bacterias.
Fotoprotección y hábitos saludables
A pesar de que el sol en principio parece que ha de ser beneficioso para las pieles grasas, es importante que las exposiciones se realicen con control y usando fotoprotección,
Al igual que sucede con las cremas hidratantes, es importante utilizar fotoprotectores solares libres de grasa (oil free).
Y es de vital importancia controlar los tiempos de exposición. Cuando se está demasiado tiempo al sol. Las glándulas sebáceas, responsables de la producción de sebo, detectan que la piel se seca y empiezan una producción extra para compensarlo, provocando un efecto rebote.
Además de la fotoprotección, los cuidados de la piel con acné han de complementarse con hábitos dietéticos saludables.
Es importante seguir una dieta rica en frutas y verduras y eliminar de la misma embutidos, bollería industrial y alimentos ultraprocesados. También suprimir el consumo de alcohol y tabaco y mantener lejos el estrés.
Y un último consejo, mantén tus manos lejos de granos y espinillas, pueden infectarse, agravando el problema y alargando su presencia en tu piel.