Vitíligo en niños, cómo detectarlo

El vitíligo en niños es bastante más frecuente de lo que creemos. Alrededor del 25% de los casos de vitíligo son pediátricos. La mayoría aparecen a partir de los diez años y los casos en lactantes suelen estar asociados a otras enfermedades autoinmunes, como el hipertiroidismo o la anemia perniciosa.

Entre los síntomas más comunes del vitíligo en niños, destacan las manchas blancas en las manos, la cara o la zona de la ingle. También la aparición de pelo blanco o gris en la cabeza, las cejas o las pestañas y un picor leve durante el proceso de despigmentación.

Si observas alguno de estos síntomas en tu hijo/a es importante que acudas al dermatólogo. El diagnóstico precoz es fundamental para detener el proceso de despigmentación asociado al vitíligo en niños.

En algunos casos, las manchas blancas que se detectan en los niños responden a dermatitis o a hongos. El especialista será el encargado de determinar su origen y pautar el tratamiento adecuado en cada caso.

Tratamiento del vitíligo en niños con fototerapia

La fototerapia se ha revelado como uno de los tratamientos más eficaces del vitíligo. Estimula la producción de melanina, repigmentando las manchas blancas de la piel y deteniendo su avance.

Además, la ventaja de la fototerapia de banda estrecha  es que es más eficaz y tiene un menor riesgo de quemadura. Algo muy importante en los niños.

En Abedul contamos una lámpara UVB-nb de banda estrecha de uso doméstico. Para que puedas aplicar el tratamiento a tu hijo/a desde casa, de forma cómoda y sin desplazamientos.

La lámpara cuenta con unas gafas de protección para los ojos, un temporizador para controlar los tiempos de exposición y un completo manual de uso.

Además, la combinación de la fototerapia con fotosensibilizantes, tópicos (Fenadul gel) y/o orales (Fenadul cápsulas) o con con antioxidantes (Meladul gel), multiplicará las posibilidades de éxito del tratamiento. Puedes adquirirlos en un pack promocional haciendo click en este enlace.