Anosmia e hiposmia, ¿sabes identificar los principales trastornos del olfato?

El olfato es uno de los sentidos más infravalorado. Anosmia, hiposmia, parosmia, heterosmia… Repasamos algunos de sus trastornos y alteraciones, los factores que los desencadenan y su tratamiento.
El olfato es uno de los sentidos más infravalorados. Anosmia, hiposmia, parosmia, heterosmia… Repasamos algunos trastornos y alteraciones del olfato, los factores que los desencadenan y su tratamiento.
Mientras que en el mundo animal el olfato es uno de los sentidos más importantes, la evolución del hombre ha hecho que en el caso de los humanos haya perdido protagonismo.
Pero ante la pérdida, este sentido cobra una gran importancia, ya que está asociado a nuestra capacidad de saborear los alimentos, de recordar momentos vividos, de disfrutar de un paseo por el campo….
A grandes rasgos, la pérdida de olfato puede ser total (anosmia) o parcial (hiposmia). Hacemos un repaso a los factores que la desencadenan y a su tratamiento.
Anosmia e hiposmia, causas y tratamiento
La anosmia es la pérdida total del olfato, mientras que en la hiposmia la pérdida es parcial. Entre las causas de esta última, la congestión provocada por el resfriado común, que es reversible, es la más frecuente.
La pérdida total o anosmia puede tener origen congénito o producirse por causas adquiridas (enfermedades obstructivas de las vías respiratorias, infecciones, traumatismos, etc.).
Entre los factores desencadenantes de la anosmia destacan, entre otros, las enfermedades nasales o paranasales, infecciones víricas de las vías respiratorias (como la gripe y recientemente el COVID-19) y las lesiones craneoencefálicas.
Algunos elementos que producen hipertrofia de la mucosa nasal son:
- rinitis crónicas y rinitis aguda
- tabaquismo
- sinusitis
- tumores nasales bilaterales.
Olfato, otros trastornos y alteraciones
Si la pérdida de olfato está provocada por el envejecimiento recibe el nombre de prebiosmia. Es lo mismo que sucede con la vista, por ejemplo (lo mismo que con el paso de los años perdemos visión también vamos reduciendo nuestra capacidad olfativa).
Otros trastornos del olfato son la parosmia, que hace que olores que antes te agradaban ahora te desagraden, o la heterosmia, que consiste en confundir un olor por otro.
La disminución del olfato puede tratarse en muchos de los casos mediante el entrenamiento olfativo. Este consiste en la exposición a un conjunto de olores de forma repetida.
En este sentido, en Abedul Productos Farmacéuticos hemos desarrollado Anosmiun, un kit doméstico para que puedas recuperar el olfato de forma sencilla desde casa. Podéis ampliar la información en este enlace.