Hipomelanosis guttata, qué es
La hipomelanosis guttata o hipomelanosis en gotas es un trastorno de la pigmentación muy común después del verano. Sobre todo en personas de más de 40 años que han realizado una exposición solar intensa.
La hipomelanosis guttata se manifiesta con la aparición de pequeñas manchas blancas en la piel. Especialmente en las zonas de nuestro cuerpo más expuestas al sol, tales como brazos, piernas y escote.
Estas manchas blancas no están asociadas ni a picor ni a ninguna otra molestia. En personas mayores de 70 años la hipomelanosis guttata puede afectar a más del 80% de la población. Está asociada al fotoenvejecimiento de la piel, concretamente al deterioro de los melanocitos, responsables de la producción de melanina.
El dermatólogo será quien deba determinar si las manchas blancas de nuestra piel están producidas por la hipomelanosis guttata o a otras enfermedades de la piel como el vitíligo o la pitiriasis alba, entre otras.
En lo que respecta al tratamiento, la fototerapia es una de las técnicas más efectivas. Sobre todo si se combinan con reguladores de la pigmentación o fotosensibilizantes que ayuden a estimular la producción de melanina.
En Abedul Laboratorios Farmacéuticos hemos desarrollado una línea de fotosensibilizantes con L-Fenilalanina (Fenadul), dirigida a estimular la producción de melanina. Se trata de Fenadul gel y Fenadul cápsulas. El primero es un gel para su aplicación tópica antes de la exposición solar o la fototerapia y Fenadul cápsulas, suplemento oral.
También resulta muy efectivo en la estimulación de la melanina Meladul gel. Con superoxido dismutasa, un potente antioxidante presente en nuestro organismo, reduce el estrés oxidativo y combate el efecto de los radicales libres sobre nuestra piel.
Cómo prevenir la hipomelanosis guttata
La fotoprotección es la mejor herramienta para prevenir la hipomelanosis en gotas. Aunque hay que tener presente que a pesar de que podamos retrasarlo no podremos eliminar el envejecimiento de la piel.
Otro de los factores que puede ayudarnos es la alimentación. Con una dieta rica en frutas y verduras y alimentos ricos en betacarotenos (zanahorias, pimientos, calabaza, boniato, etc.) y vitamina D (huevos, salmón, anchoas, sardinas, atún…).
Además para retrasar el envejecimiento de la piel se recomienda evitar el consumo de tabaco, alcohol, alimentos ultraprocesados y reducir el consumo de azúcar y harinas refinadas.